(Esta nota nos la envió nuestro buen amigo y paisano, Javier Gil Martinez, desde Vancouver, Canadá)
Santa Lucía Cotzumalguapa se ha caracterizado por la gran variedad de personajes, que han engalanado las páginas de su historia. La gran mayoría de ellos, lucianos de nacimiento; otros, lucianos de corazón, que ha pesar de su corta estadía entre nosotros su presencia se recuerda con cariño y respeto, debido a la profunda huella que dejaron en nuestras vidas y en nuestro corazón.
Ese es el caso de el Padre Cirilo Morisco, Sacerdote de los religiosos franciscanos con sede en Estados Unidos. El Padre Cirilo llega a Santa Lucia, en compañía del Padre Arcángel Sica, a finales del año 1948, para sustituir al padre Ignacio y a otro sacerdote de la misma congregación, que habían llegado a nuestro pueblo en julio de ese mismo año, para hacerse cargo de la parroquia.
Ellos a pesar de sus limitaciones idiomáticas, asumen con paciencia franciscana un trabajo pastoral que abarcaba todo el municipio de Santa Lucia con sus fincas y aldeas, pero que se extendía a Siquinalá, La Democracia, La Gomera, Sipacate y Tiquisate. En Siquinalá, atendían no solo la cabecera municipal, sino algunas fincas como San Andrés Osuna, Diamantes, Ceylán y Pantaleón.
Ellos encontraron un templo dañado por movimientos sísmicos recientes, que habían destruido el campanario izquierdo de la iglesia. En ese tiempo en el atrio la iglesia había un gran promontorio de tierra y piedras. Obviamente por el riesgo que esto representaba para la feligresía, la mayoría de las celebraciones se realizaban en el salón parroquial que ya existía, aunque las misas dominicales y otras festividades especiales se celebraban en el templo.
Fue así como entre celebraciones aquí y allá, se fue dando la reparación interior del templo, la construcción del campanario y la ornamentación del frente de la iglesia con el atrio que ahora conocemos.
El padre Cirilo tenia una especial predilección y preocupación por los niños y por su educación y es durante el año 1949 en que paralelamente a la solución de otras necesidades parroquiales, empieza a planificar la apertura para 1950 de el Colegio Parroquial “San Antonio”. Noticia que se riega como pólvora en el departamento de Escuintla, pues se trata del primer colegio PARROQUIAL en todo el departamento y llegó a ser el primer colegio que, mas tarde tuvo estudiantes internos y cuarto-internos. De los establecimientos existentes en la actualidad es el pionero de la educación privada en Santa Lucía Cotzumalguaa.