Datos personales

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Santa Lucía Cotzumalguapa, Escuintla, Guatemala
Nací en Santa Lucía Cotzumalguapa, Escuintla, Guatemala, el 3 de enero de 1940 o sea que actualmente tengo la friolera de 76 años. Estudie la carrera magisterial, un poco de Periodismo y fui pre-graduado en Diplomacia ya que sólo me faltó para graduarme, el examen de idiomas, al que nunca me sometí. Ni modo. Hasta la llegada a la municipalidad luciana, del alcalde "amigo de todos, pero no de los intelectuales" me desempeñé como Coordinador Municipal de Cultura y en el área de comunicación social de mi pueblo, en lo relativo a redacción (porque como muchos saben, a causa de un cáncer de laringe, estoy privado del don del habla desde el año 2000). Pero también sigo escribiendo poesía, cuento y -desde agosto del año 2015 ya no sigo editando mi propio medio de comunicación, la Revista COTZUMALGUAPA, a la que le pusimos el apodo de "LA REVISTA DIFERENTE"-. Por lo demás, sigo pensando, escribiendo y actuando con definida inclinación de izquierda.

jueves, 11 de marzo de 2010

A VUELO DE PAJARO (febrero)

Especie de coctail mensual del mentado Oscar Bran Lorca,
articulista de COTZUMALGUAPA "La revista diferente"


Permítame contarle que, con el deseo de apoyar a unos jóvenes estudiantes de nivel medio en su afán por conocer un poco de la historia de nuestro pueblo, (porque sus maestros les pidieron hacer esa investigación como parte de sus estudios) entresaqué lo siguiente sobre la fundación de la escuela "25 de Junio":

Fue la tercera escuela oficial que se construyó en Santa Lucía. Antes de ella sólo estaban la Escuela de Niñas y la Escuela de Varones. Fue construida durante la administración municipal del señor Miguel Ángel Morales, en el año 1972. Lleva ese nombre porque el alcalde insistió en que se debía inaugurar precisamente el día 25 de junio en homenaje al Magisterio Nacional. Influyó mucho en ese deseo, el hecho de que varias personas de su familia eran maestras y también su identificación política con la fecha, que fue el inicio de la lucha que daría origen a los 10 años de gobiernos revolucionarios (1944-54).

La escuela, originalmente de seis aulas y su respectiva dirección, fue construida con el aporte de Q 8,000.00 por parte del Comité Nacional de Construcción de Escuelas (del gobierno central) y Q 16,000.00 que aportó la municipalidad de sus fondos propios.

Es anecdótico el nombramiento del primer director de "la 25": Al afirmar las autoridades educativas que por razones presupuestarias, hasta el año 1973 se nombraría al personal docente y administrativo, el Concejo Municipal de Santa Lucía decidió nombrar al profesor José Miguel Martínez Orellana (Chemequel, para los amigos) como director y a otros tres maestros, con cargo a la tesorería municipal de nuestro pueblo. Y con ese limitado personal, la escuela principió a funcionar en la fecha que querían nuestras autoridades. Posteriormente llegó nombrado por el Ministerio el director Roberto Urrutia. El gobierno municipal de nuestro amigo Miguel Ángel ("Macizo") Morales tuvo otros importantes hits, de los cuales le voy a contar en futuras entregas.
Por ahora quiero referirme a todo el alboroto que están haciendo alrededor del tristemente célebre pollo frito (es que sigue siendo pollo ronco, por el habla, pero desde que lo tienen enjaulado, le queda mejor el apodo de frito… al fin y al cabo de pollo no va a pasar) pues resulta que el susodicho señor, que de baboso no tiene un pelo y de trácala tiene una gran melena, seguramente luego de haber puesto a nombre de su querida esposa, la chatía Evelyn, los millones que se logró pepenar en su paso por la presidencia de nuestro país, dispuso, de plano que de común acuerdo con la interfecta, fingir que se divorciaban, para tratar que la plata le quedara a ella mientras el otro se rascaba las pulgas en una hipotética prisión que tal y como se sabe, le llegó antes de lo que el mismo esperaba.

Pues ahora resulta que el pobre pollo está enfermito… al extremo que tuvieron que meterlo al intensivo en el Hospital "Melitar". Nomás que esa mentira no se la cree nadie, mas que nuestros jueces y por supuesto todos los que forman parte de su círculo familiar y guizachezco. Es un truco tan trillado en nuestra pobre, desprotegida y atolondrada patria que no debiera ser ni tomado en serio. Si un compa está preso y en realidad está enfermo, que le lleven sus medicinas al bote. ¡Qué de a güevo, si yo me enfermo y no me alcanza para pagar una consulta privada, tengo que ir a hacer cola al Igss o a un hospital del estado, pero un ratero que se ha huveiado varios cientos de millones, hay que cuidarlo y hay que llevarlo al intensivo… por mí, que se cure o que se muera en prisión por muy ex presidente que sea. Aunque por decir eso me señalen de inhumano y me quieran acusar con los de los derechos humanos…!

Y déjeme darme un baño de inmodestia: cuando después de mi primer exilio volví a mi pueblo, como profesor de la Escuela de Varones, vine con el "prestigio" de haber ganado un par de años antes, los Juegos Florales Navideños y el de escribir artículos de opinión, mensualmente, en el periódico oficial del pueblo. Pues resulta que tal vez por eso, a los pocos días, el Supervisor de Educación me nombró para decir el discurso oficial el día de la nacionalidad (20 de febrero en honor a Tecún) y jamás me volvió a nombrar para hablar en actos públicos, porque ese día hablé de la mala suerte de los tecunes de esos años, porque en lugar de morir peleando contra los invasores de sus tierras, como su glorioso antepasado, morían a causa de las fumigaciones o por el paludismo en los algodonales y las fincas de caña de la costa sur. Eso no era oficialmente correcto, y mi discurso fue señalado como "subversivo". Y ni modo, la regué… según la opinión oficial.

Pues hoy quiero finalizar este articulejo haciendo una defensa de la figura de Tecún: a mí se me enseñó que Tecún pensó que caballo y jinete eran la misma cosa y que por eso al matar al caballo de don Pedro, este aprovechó para matar a Tecún. Crasa mala interpretación de un hecho histórico. Para reivindicar al héroe indiano, yo tengo esta visión: el guerrero quiché no era ningún pendejo.

Sabía que tenía que desmontar al español para pelear en igualdad de condiciones. Y por eso le tumbó el caballo. Cómo lo hayan matado después los españoles, no está documentado; pudo haber sido que don Pedro de Portocarrero, haya ayudado a su jefe y casi suegro. O pudo caer bajo las balas de algún arcabucero.

En fin, lo que quería decir es que según yo, Tecún no fue ningún baboso…

miércoles, 10 de marzo de 2010

¿DÓNDE QUEDA LA AUTORIDAD MORAL?

Escritor emergente: Luciano Calel Sotoj


En medio de la vorágine de acontecimientos –muchos de ellos evidentemente negativos- que se dan casi a diario en nuestra realidad nacional, es oportuno a veces hacer una reflexión, así sea breve y empírica como la nuestra, sobre algunos aspectos que a todos nos interesan, ya que tienen incidencia directa en la fortaleza o debilidad de nuestro Estado de Derecho.

En ese sentido, nos llama la atención la forma como algunas de nuestras autoridades se creen o se sienten ser superiores a la ley y les vale un soberano y serenado cacahuate el respeto y el cumplimiento de la misma.

Creen equivocadamente algunos de estos servidores públicos, que ostentar algún grado de autoridad es como portar una patente de corso para hacer lo que les venga en gana y que los demás, simples súbditos de sus "ilustradas" ocurrencias, simplemente debemos ver, oír y callar…
Pero no es así. De alguna manera les tenemos que hacer ver a estos señores que somos un pueblo digno y que como tal merecemos respeto.

Para el sano ejercicio de la autoridad no sólo hay que cumplir con el requisito formal de estar investido de ella; hay que tener los atributos necesarios para merecerla. Veamos, aunque sea un poco superficialmente, dos casos que en los últimos días han acaparado los titulares de la prensa nacional: uno, la del señor Presidente de la Corte Suprema de Justicia que se fue a un viaje utilizando recursos públicos en forma fraudulenta porque sus viáticos eran pagados por el Organismo Internacional que lo invitó. Además se llevó al viaje con el pretexto de necesitar a una asistente, a su guapa secretaria de 23 o 24 años.

Al final de un estira y encoge legaloide, se le obligó simplemente a devolver parte del dinero malversado. ¿y ya con eso nuestra sociedad se dio por bien servida? Eso es lo malo: nuestra timorata forma de actuar. A ese señor se le debiera haber separado inmediatamente del cargo por inmoral. O de otra manera el mensaje que se le manda a los demás burócratas es que pueden hacer micos y pericos con la plata ajena, pues si no se les descubren sus transas se pueden quedar felices y tranquilos y si acaso se les descubren, no hay problema, devuelven una parte y a otra casa mariposa. Y lo bailado ya nadie se los quita…

Y el otro caso es el del señor ministro Malvenido Marioneta, que para ocultar los datos del manejo de los fondos de Mifapro (que en honor a su buen nombre debieran ser TRANSPARENTEMENTE UTILIZADOS Y ABSOLUTAMENTE FISCALIZABLES) llegó al extremo de desacatar las órdenes de las máximas instancias judiciales y administrativas del país.
Al momento de escribir esta nota, el caso de este señor, que es la máxima autoridad en la EDUCACIÓN de nuestro pueblo, tomó el rumbo previsto en nuestro ordenamiento jurídico: se pidió por parte de la diputada Montenegro, SU INMEDIATA DESTITUCIÓN. No sabemos en que vaya a parar todo el sainete.

Pero de cualquier forma el mal está hecho: se dio el mensaje a todos los maestros y a todos los alumnos, por parte de la máxima autoridad (repito) educativa, de que como alguien dijo en una fase que se ha hecho célebre, "la crítica viene del norte…"

O sea en Guatemala se pueden desobedecer impunemente las ordenes así sean emanadas de las mas altas instancias. La pregunta final es la misma frase que utilizamos para el acápite: ¿DÓNDE QUEDA LA AUTORIDAD MORAL?

N. de la R. Antes de enviar a prensas nuestra edición, fue destituido el ex ministro Bienvenido Argueta, por orden emanada de la Corte de Constitucionalidad (CC) que fue acatada por el Organismo Ejecutivo.

lunes, 8 de marzo de 2010

CARTA DE UN BUEN AMIGO

Carlos Barranco R.
(Preámbulo: Recibí, de mi joven amigo Luis Rudy Xalín una carta que quise compartir con los lectores de este espacio ya que muchos de ellos lo conocieron a través de la Revista Cotzumalguapa. Así que sin mas, ai va)

Reciba un fraterno saludo lleno de entusiasmo, y a la vez, de profunda nostalgia de su pupilo que lo aprecia mucho. Desde ( ), comprendo lo que se siente estar exiliado (este no es mi caso por supuesto, pero como si lo estuviera). Como usted ya sabe, el motivo de estar en este país ( ) es para trabajar, y de esta forma ganar los tan anhelados billetitos verdes, aunque los de a Quetzal sean del mismo color, estos tienen la ventaja que valen ocho veces más que los nuestros. Ni modo.

Sin embargo, pagar el precio de emigrar es bastante caro. Adaptarse a otro lugar cuesta. Son nuevas costumbres, formas de vida, transporte, labores… en fin, de ribete tengo que andar con miedo porque me puede agarrar la migra…ña. En esta nación la ley no es como la carabina de Locho, pero si alguien anda como la gente, decía mi abuelita, tiene menos riesgo de enfrentar problemas con la justicia. Por el contrario, lo meten al bote y lo mandan “pa’ trás”, a su país de origen, lo bueno es que lo hacen por vía aérea y de gratis. O, si se corre con buena suerte, le dan una oportunidad para legalizar los papeles que en este tiempo es mucho más difícil arreglar el estatus migratorio. Es mejor perderse sin dejar rastro alguno.

Por este medio, otra vez le pido que le permita a mi enjambre de letras volver al espacio abeja, al panal, o sea, que me ceda un espacio en la revista COTZUMALGUAPA para publicar mi verbo escrito. Pues no dejo la manía de escribir (a veces puras tarugadas) mis opiniones, sugerencia o comentarios. Digo yo…

Gracias a su espíritu de expandir cultura por medio de la literatura, fue usted quien me ayudó a encarrilarme al mundo de la escritura, allá por el año 2002, cuando la inquietud de escribir, a veces, no me dejaba dormir. En ese tiempo me dio un espacio en su revista para que publicara sin censura. Desde esa vez, mis publicaciones no salían cada mes, no obstante así comencé. Y posteriormente, logré saborear las mieles del triunfo al ganar, en los Juegos Florales de Siquinalá, el primer lugar. Y un tercer lugar, en Escuintla, siempre en la rama de prosa. Creo que fuimos los primeros Lucianos en ser laureados juntos en un mismo certamen lirico literario, para orgullo de Santa Lucía Cotzumalguapa. Bueno, dejaré la reseña para otra oportunidad. Lo que sí quiero resaltar es que sin su ayuda, quizás no hubiera encontrado el camino al maravilloso mundo de las letras. Eternamente agradecido.

Felicitaciones por haber celebrado un año más de vida, me hubiera gustado saludarlo por vía telefónica pero por circunstancias fuera de mi alcance no lo pude hacer. Quiero que sepa, que le deseo sinceramente muchos, pero muchos años más de vida. No vaya “a colgar los tenis” sin antes tomarnos unas copas... Como dice el libro de “Juan Salvador Gaviota” llegar a un alto grado de conocimientos requiere de muchos años o de varias vidas (de reencarnación) y creo que usted en una sola, sé saltó incontables vidas. En eso quedamos…

Y, también, quiero pedirle que salude de mi parte a Lisandro Estrada, dígale que me debe un autógrafo… A Rafael Santos, a Willy Pinto. Saludos también, a su esposa María Estela y a Alfredo Morán Aguilar. Y a los otros compas que no pude conocer, Manuel Suyán y Fernando Alvarez. Más adelante me gustaría ver una fotografía que incluyera al staff completo, sin embargo sé que para reunir a todos es un poco difícil. Sé lo dejo de tarea. Ok.

Además, por si fuera poco, recibí su orientación basada en su experiencia de incontables triunfos sobre el arte de escribir poesía… “La métrica, el ritmo, la rima, la cadencia”, me decía y yo no entendía ni papa. Pero seguí con la necedad de garabatearle poemas a mi traida. Según mi entendimiento, yo escribo sonetos, dizque clásicos… seguiré en pos de mis ideales con su incondicional ayuda, aunque nos separen miles de kilómetros de distancia.