CARTA ABIERTA AL SR. ROLANDO GUZMAN

(Transcribo textualmente esta carta que me llegó via internet el día 4 de enero de 2012. Carlos Barranco R.)

Señor Don Rolando Guzmán
Alcalde Electo de Santa Lucía Cotzumalguapa.

Apreciable Señor Guzmán: Con bastante pena –dadas las circunstancias de su tiempo- me dirijo a usted para saludarlo y aunque no tengo el honor de conocerlo, poder manifestarle el respeto, que por la digna representación de mi pueblo, usted merece.

Como es obvio, no voté por usted, ni por ningún otro candidato de mi amado terruño, por la distancia que me separa de él. Distancia que cada vez se hace más dolorosa, pero que no me permite ignorar su historia ni los hechos que la van determinando; es por esa razón que me he tomado la libertad de escribirle, para externarle algunos puntos de vista frente al gran honor que hoy tiene en sus manos de servir a mi pueblo; un honor que en su momento, un grupo de soñadores luchamos por tener y que nos fue arrebatado en las elecciones de allá por 1974 y 1978.

Lo primero que quisiera pedirle es que no se deje llevar por la vanidad, ni se deje envolver por los aduladores. Respetando su fe religiosa, le pediría que cada proyecto municipal lo ponga antes que en nadie, en las manos del GRAN CONSEJERO. Y finalmente me atrevo a sugerirle que se deje acompañar de dos o tres personas del pueblo, llenos de historia y llenos de sabiduría para que le ayuden a discernir los pasos que va a dar.

Hoy es su turno, y el de sus concejales, para escribir la historia de mi pueblo, pero es una historia que debe ser escrita con valentía. Primero al interior del propio concejo municipal revisando lo oneroso que son para el pueblo los montos tan elevados que se recetan por sesión, por dietas y otros gastos y esto lo incluye a usted también; porque con un poco de conciencia social y un poco de esfuerzo, podrían iniciar con esa plata la fundación de una guardería infantil para ayudar a todas las madres trabajadoras de mi pueblo, especialmente solteras.

Debe ser escrita con valentía también frente a los poderosos que siempre tratan de imponer su voluntad, por encima de los intereses y necesidades de una gran mayoría, los tristemente ignorados de siempre… el pueblo.

Que sea una historia escrita con la sonrisa de los niños… con el “Dios lo bendiga a usted y su consejo señor alcalde” de las madres agradecidas por los beneficios para sus hijos y sus familias. Una historia escrita con el apoyo franco y decidido de un pueblo que sabe responder ante la invitación de su líder en la realización de los proyectos comunitarios.

Una historia escrita por la naturaleza misma, agradecida por el esfuerzo de una administración consciente de la rehabilitación del ecosistema y de paso devolviéndole a todos los ciudadanos la alegría ya casi olvidada de los paseos a la campiña y a sus ríos.

Una historia escrita con la alegría de las familias, al contar, no con uno o dos parquecitos de mala muerte para sus hijos, sino con muchos parques infantiles, amplios, hermosos, coloridos, atractivos y variados para hacer plena la alegría de chicos y grandes, tanto en la ciudad como en el área rural. ¿Ejemplos? hay muchos, Costa Rica es un bello ejemplo de atención a la niñez en toda la extensión de la palabra, pero si fuera necesario podemos hacerle llegar proyectos similares de otros países. Imagine a todas las aldeas de mi pueblo, (Bethania por ejemplo) con bellos parques y llenas de visitantes todo el tiempo y también en el área urbana, es decir lo que llaman ciudad, deben aprovecharse todos los espacios que permitan la recreación sana de la familia en general, pero especialmente de los niños.

Que sea una historia escrita con un extraordinario proyecto de salud, es decir un hospital con todos sus servicios, que dicho sea de paso es una exigencia para ascender de categoría a una comunidad. Vale la pena recordar que el Centro de Salud de Santa Lucia Cotzumalguapa fue construido allá por 1952. Creemos que Santa Lucia (Como dicen las abuelas) está en edad de merecer.

Exigimos que los hermanos de la tercera edad, sigan recibiendo el apoyo que hasta hoy gracias a muchas voluntades ha sido posible.

En fin, Señor don Rolando Guzmán; gracias por tomarse el tiempo para leer a este soñador y quizás se pregunte ¿y este señor por qué no me mencionó el agua potable?

Y le respondo: por una razón simple; todos esos pequeños proyectos son realizables en estos cuatro años y mientras tanto usted se prepara para realizar el gran proyecto del agua potable en los posteriores cuatro años. Porque mi pueblo es agradecido y para entonces los niños de mi pueblo van a votar también por usted

Respetuosamente:
Javier Gil Martínez. Vancouver, Canadá