Carlos Barranco R. (Publicado en COTZUMALGUAPA, la Revista diferente)
Es realmente lamentable que lleguen a dirigir el ministerio de educación personas que no tienen la suficiente capacidad para entender los problemas que hay en ese campo y simplemente atienden lo que les dicen sus asesores. A la realidad del sistema educativo nacional se le podría dar un giro de 180 grados (A la actual ministra, con todo y su licenciatura, se le fue un lamentable gazapo en ese sentido ya hace tiempo aseguró que le daría a la educación un giro de 360 grados, o sea que le daría una vuelta redondita, completita, para dejarla en el mismo punto...).
Claro que la mala preparación de los actuales maestros es un punto clave del problema. Pero sólo es la punta del iceberg. La gran montaña que no se mira es la pésima preparación de los alumnos desde el nivel primario a causa del inadecuado sistema educativo nacional. Es todo un círculo vicioso: los alumnos aprueban una primaria ABSOLUTAMENTE deficiente, pasan a aprobar después un nivel medio TOTALMENTE MALO, y al llegar a la Universidad truenan a sapo.
Pero todos los que salen del nivel medio como peritos, como bachilleres, como maestros o como lo que sea, en un texto cualquiera tienen una ortografía de nivel primario... y estos "maistros" van a enseñar después a millones de patojos que saldrán igual. ¿La solución? ¿zamparlos a estudiar tres años mas? no nos hagamos pendejos. Van a seguir saliendo mal preparados. Lo que hay que cambiar es la forma de enseñar y la forma de evaluar. Vamos, hasta la forma de supervisar.
Porque un Supervisor de escritorio, que sólo se encarga de firmar y acumular cientos y cientos de papeles, con un montón de "mallas curriculares" que nadie aplica en realidad, no sirve de mucho para elevar la calidad educativa. Los supervisores debieran andar como antes, SUPERVISANDO el trabajo de directores y profesores. Recuerdo con nostalgia cuando don Alfonso Avila nos visitaba en la Escuela de Varones y entre broma y veras nos llamaba la atención si algo no andaba muy bien... y estoy hablando de hace nada mas treinta años. Y todavía antes la educación era mejor, segun decían nuestros mayores. Claro que en ese tiempo el maestro (así fuera empírico, o sea con conocimentos nada mas por experiencia, sin soñar siquiera en conocer la U) tenía verdadera vocación magisterial.
El sistema de evaluación es otra rémora que habría que cambiar: no es correcto que cada maestro evalúe a sus propios alumnos sobre nada mas los puntos que el malamente pudo "enseñar" de su programa. Todo mundo debiera enseñar TODOS LOS TEMAS PROGRAMÁTICOS. Y se debiera volver al sistema de hacer un solo examen a la misma hora y el mismo dia en todo el teritorio nacional. Cuando examinaba un maestro desconocido a los alumnos de un grado y en una escuela donde nunca antes había estado. Y los exámenes eran algo esperado y temido. Pero eficaz. Y aquellos maestros que por huevones o incapaces no pudieran cubrir todo el programa y que por esa causa sus alunmos salieran mal calificados, sencillamente despedirlos del trabajo por ineptos.
Volvería la primavera a las aulas de la primaria y los alumnos saldrían realmente sabiendo. Y por otra parte habría que revisar y reformar la calidad de educación que se imparte a nivel privado, porque, es cierto, hay varios colegios (en la capital especialmente) donde ofrecen verdadera calidad educativa (pero así cobran también) pero en el 95 o mas por ciento de los establecimentos educativos del interior, la cosa tiene ribetes de horror: hay "maistritos y maistritas" recien mal-graduados que son contratados para dar clases (hasta en nivel medio) y que tienen una preparación académica sencillamente desastrosa.
Pero como les pagan en realidad una porquería que no llega ni al salario mínimo, tampoco les pueden exigir calidad. Habría que elevar las cuotas de colegiatura para que los colegios privados pudieran elevar salarios y elevar calidad. Esos temas habría que arreglar primero señora ministra. Ya después veríamos eso de aumentar dos, o tres o los años que quiera a la carrera magisterial. Invitamos cordialmente a todas las personas interesadas en esta problemática a sugerir sus propios puntos de vista. Aquí les aseguramos que les daremos un espacio para debatirlos. A ver de a como nos toca.