En primer lugar, quiero contarles que en la Fraternidad Luciana estamos de duelo. Los designios de Dios son inescrutables. Hace apenas unos cuantos días, ¿recuerdan? les compartí que estábamos de fiesta porque una generosa dama luciana, doña MARIA GABRIELA CANCELO OSSORIO, nos había prometido donarnos y que oportunamente nos escrituraria, una propiedad situada en el corazón de Santa Lucía y que en esa propiedad, de la que nos entregó las llaves, ya estábamos buscando la manera de acondicionar lo que sería una Clínica Médica gratuita para personas de la Tercera Edad.
El trámite legal de la escrituración debía esperar a que las autoridades de gobernación, autorizaran la personería jurídica de nuestra Fraternidad. Un trámite que habíamos estado realizando desde hacía algún tiempo pero que todavía para esos días no se había logrado finalizar.
Pues resulta que a los seis o siete días de nuestra última entrevista con ella, el lunes 16 de marzo, (irónicamente, el mismo día en que nos notificaron que fuéramos a recoger nuestra documentación a la dependencia de gobernación encargada del registro de las personerías jurídicas) nos dieron la ingrata noticia de que nuestra benefactora había fallecido víctima de un infarto. Casi no lo podíamos creer. Pero así es la vida. Y así es la muerte.
La inesperada decisión del Creador no dio tiempo para que María Gabriela nos legalizara ante Notario la donación ofrecida. Y así como ella se encuentra ya durmiendo el sueño de los justos, nosotros creemos que su buena voluntad va a dormir ese mismo sueño, porque como no tenía hijos a quienes heredar, sus bienes seguramente quedaron intestados y serán ahora los familiares mas cercanos, quienes queden en posesión legal de los mismos… y ellos ni enterados estaban de la generosa donación que ella nos había querido hacer… como Dios así lo quiso, repetimos las palabra de Job: Bendito sea Dios…
Una cosa sí podemos asegurar: con esa donación o sin ella, nuestro deseo de abrir una clínica gratuita para los ancianos en situación de pobreza, no sabemos cómo pero lo llevaremos adelante. En serio.
Descanse en paz nuestra buena amiga. Sabemos que el Creador la recompensará en la Vida Eterna por su generoso desprendimiento. Y nuestras oraciones sinceras por el eterno descanso de su alma esperamos que la ayuden en su crecimiento espiritual…
Por otra parte, la otra nota luctuosa que debo compartirles es la que se relaciona con el asesinato de la Concejal Primero de la corporación municipal de Santa Lucía Cotzumalguapa.
La madrugada del jueves 19 de marzo, sicarios no identificados la esperaron cuando salía de su hogar hacia una sesión de Concejo en la Municipalidad y le acertaron tres o cuatro balazos de un arma de nueve milímetros, que cortaron su existencia al nada mas llegar al sanatorio privado a donde se le llevó de emergencia.
Mabel era una profesional de la ingeniería química, que se desempeñaba exitosamente desde hacía tiempo como ejecutiva de uno de los ingenios más importantes de la región. Se puede afirmar que no había llegado a la municipalidad por interés económico ya que con su trabajo había formado una fortuna considerable. Y en la corporación se le consideraba una persona muy valiosa por su capacidad de liderazgo, por sus ideas e iniciativas y por estar promoviendo varias acciones en beneficio de la comunidad.
No se puede emitir hipótesis confiable sobre los móviles de este crimen que fue repudiado por todos los sectores de la población. Rumores, como es lógico, hay variados. Pero a ellos no se les puede dar ninguna clase de crédito. Lo que se espera de parte de la población honrada y pacífica, es que de alguna manera las autoridades cumplan con la parte que les corresponde, en cuanto a las averiguaciones, para conocer y castigar a los responsables, porque se le debe poner un hasta aquí a tanta violencia.
Como se da cuenta, a veces no hay muchas buenas cosas qué comentar… ambas lucianas, descansen en paz…
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