IGSS DE LA #$%&?&%

Publicado en COTZUMALGUAPA. La revista que NO SE VENDE.

Todos los guatemaltecos que medio nos mantenemos informados de las barrabasadas que se cometen cotidianamente en nuestro país por parte de quienes se sienten amos y señores de nuestros pueblos (a nivel nacional, departamental o municipal) porque gracias a unas votaciones dizque democráticas llegaron a ocupar ciertos espacios de poder, nos asqueamos al ver todas las asquerosidades de que hicieron gala para destituir al Presidente de la Junta Directiva del IGSS. Indignan los niveles de bajeza a que se puede llegar con tal de cumplir las órdenes, o mejor dicho los caprichos de los "mandamases".

Dejemos fuera del análisis el asunto de que el señor Mayen podía ser destituido (y lo fue) sin importar lo que en tal caso exige la ley orgánica de ese ente semiautónomo.

Eso, que habría qué haberlo determinado una entidad ajena a los protagonistaas del intringulis, como por ejemplo la CC, se hizo así porque así lo había ordenado el Señor Presidente, al mejor estilo de Carrera. Barrios. Estrada Cabrera o Ubico,

Hasta allí, aunque era algo dictatorialmente definido, lo podía aceptar nuestra aborregada sociedad porque era un "mandato" de la mera cúpula de nuestro sistema presidencialista.

Pero lo que vino despues no tuvo madre. Que cual viles rateros, personas que se supone tienen un alto espíritu ético porque fueron nombrados por el mismo "Señor Presidente" para limpiar de cochambre esa institución, entraran con lujo de fuerza a las oficinas del tal señor Mayén, le cambiaran las chapas a las puertas. Violentaran las gavetas de su escritorio, tomaran sin permiso sus pertenencias personales, su celular (que también es un aparato privado) y hurgaran en los archivos de su computadora para utilizar toda la podredumbre que una mente retorcida pudiera allí tener guardados, para provocar con ello el descrédito y el linchamiento moral de un funcionario, es algo que nadie debiera justificar.

 

Que Mayen hiciera mal uso de su investidura y que rebajara la respetabilidad de ciertas señoras que a ello estaban dispuestas con tal de medrar con el uso prostituido de sus cuerpos, aunque es moralmente condenable, en todo caso queda al libre albedrío de quienes tienen en poca estima su propia dignidad. Pero no es de hombres y mucho menos de representantes del titular de la máxima investidura política de un país, andar como ratas de alcantarilla hurgando entre la podredumbre y tirando heces sobre quienes forman esas familias que fueron salpicadas por estos moralistas de a centavo...

Cómo nos gustaría que ese montón de distinguidas señoras integrantes del titipuchal de OENEGES que se afanan en publicar artículos y campos pagados en "defensa de la equidad de género" y que discuten y argumentan sobre el "femicidio" condenaran a quienes expusieron a la picota pública a sus compañeras mujeres, porque un señor representante del gobierno, con tal de que ya no se siguiera dando espacios de validez a la postura del expresidente del IGSS y que todo mundo se callara porque podrían sacarle tambien sus trapitos al sol, no respetó sus derechos a hacer de sus cuerpos un capirucho.

Ojalá que tanto escarnio sirviera para algo positivo. Pero lamentablemente no será así. Ya verá usted. Los que se la llevan de moralistas muchas veces salen peores.